7. Conclusiones

 

               Esta propuesta reformista sería utópica si para llevarla a cabo implicase recursos monetarios faraónicos, incluyendo importar expertos para asumir cargos, comprar hardware en el extranjero, software llave en mano o construir nuevos edificios. Decíamos que resultaba contradictorio que contando con recursos no pudiésemos lograr niveles de productividad que satisficieran las demandas sociales.  

        Esta estructura pública actual es un híbrido, que por más modificaciones que se le ejecuten es irrecuperable. Tanto el operario (el nivel político) como la herramienta (el estado) no responden al objetivo a satisfacer (cumplir con la sociedad).

        En fin, para lograr un estado productivo, base de un país que debe dejar de ser “bananero”, debemos cumplir con ciertos requisitos indispensables: una clase dirigente coherente con tal misión, que excede a este trabajo , que incluiría una reforma pública trascendente y factible como la propugnada, totalmente perfectible, recurriendo al potencial del seno social para lograrlo.

            En definitiva dejar de ser un país con recursos pero pobre y asimismo de ser una incógnita para el mundo por tal fracaso. Como decía Ortega y Gasset: Argentinos a las cosas  y podemos, pues tenemos el "saber hacer".

                                  

 

 Gracias por su atención.

 

Punto 8 del ensayo: Esquema del proceso de Reforma