EN EL REINO DEL OFF
Nada más contraproducente
para tal reino que los medios, sin distinción de nivel, tamaño, importancia.
Basta un celular y puede ser el certificado de defunción de un personaje
público, ni hablar de un texto, documento o foto/video inconveniente en las
redes sociales. Generalmente las aclaraciones oscurecen. Tales
redes no excluyen a nadie, sea quien sea… y todo tiene un precio cuando emerge
malintencionada. En fin, estamos en el siglo 21, sus inicios, y cuanto más se
avance en el mismo acrecentaran las cámaras que nos vigilaran en nuestra
cotidianidad… con excusa suficiente del ISIS,
o como se llame en el futuro el terrorismo de cualquier índole ¿Triunfará el
derecho a la privacidad, o nos tendremos que contentar con nuestra forzada
exhibición?
Ahora nos vemos más atosigados con
las versiones indirectas del OFF,
intrínsecamente vinculado a las posibles faltas a la verdad o errores de
interpretación, que implican una posverdad,
que también puede ser falaz… ¡Bah!, como diríamos vulgarmente “estamos en el
horno”. Ya podemos desahuciar al viejo recurso de frases fuera de contexto.
Recuerdo a un dialogo del film FARGO, en
el cual uno de sus personajes expresa que la verdad
es una mentira aún no descubierta. Creo que era un letrado, que
ejercen en el imperio de la mentira (quien no quiere salvarse de ser
condenado/procesado/imputado). Qué paradoja que ello ocurra donde el objetivo
es la verdad, base de la justicia. Disculpen la digresión pero no puede
soslayarse esta etapa de la historia humana, en la cual las crónicas cotidianos
mediáticas horrorizaran a nuestros futuros descendientes, por nuestra barbarie
o nuestra indulgencia…(Dios dirá).
Volvamos al reino del OFF. Nos restringiremos al ámbito
nativo, pues con Trump/Putin/May/Xi Jinping, etc.
etc. es una versión más atroz/sofisticada y patética. Más aún con este gobierno, cuya gestión económica está en
discusión permanente, hasta expresarse periodísticamente que los funcionarios
son ciegos en una habitación sin luz… Continuamente se alude a los dichos de
los funcionarios del mayor nivel gubernamental, electos o designados, que
despotrican contra su gestión admirada en el mundo y criticada sin piedad
localmente. En pleno gobierno de la dictadura el ministro de economía – Martínez de Hoz- expuso en un centro
económico del primer mundo su cosmovisión inherente a su gestión como
funcionario (creo que era Montreaux). Finalizada la misma los casi 400
asistentes – economistas internacionales de sesgo neoliberal en su pleno
apogeo- aplaudieron de pie fervorosamente a nuestro funcionario, según contaba
la crónica. Por siempre cuando las expectativas son satisfechas para el
auditorio emerge el fervor, lejos muy lejos de aproximarse a la verdad sino a
los paradigmas vigentes. Equivale al grito de gol en un estadio de la
respectiva hinchada, más allá si jugaba bien/pésimo, o en contra, vía torpezas
del adversario, o factible de ser nulo (con la mano), pero validado. No
importa, las expectativas del público adicto eran ganar y se dieron. Colmar
expectativas-fervor un par que debe ser discernido en tiempo y forma. Moraleja, cuidado cuando te adulan…
Francamente, no sé si ese off
indirecto (tal dice esto) no está manejado por el mismo gobierno, o no, o un
mix. Como decir que los precios (léase inflación), emergen por los empresarios
emulando a Kicillof, lo cual es
pésimo para quien aludía en campaña que la inflación no sería un problema
(video viral de por medio para los no memoriosos). O quienes vuelven a aludir
que luego de este semestre bajarán los índices, lo cual nos lleva al fracaso
del primer semestre 2016 ¿Por qué ahora funcionara? Parecería que quienes
manejan nuestra economía no diferencian a las pymes
de los usuarios comunes. A éstos se los pretendió convencer que omitiendo una
pizza podrían absorber el impacto de la suba de tarifas. Lógicamente a los
porteños y suburbanos bonaerense (léase futuros votos). Puede ser, dado que en
porcentajes el aumento es importante pero en términos concretos equivalen a
valores superables, para las clases medias-medias (las más bajas ya no compran
pizza, sino pre). Pero las a las pequeñas empresas los atosigan
considerablemente. Ya no les incide en un porcentaje ínfimo de sus costos, sino
en dos dígitos. Ergo lo transmiten a los precios. Los servicios acorde al
dólar. Así no van a pegar nunca el posible incremento de aquellos (ya nadie
cree en el 15% anunciado). Será hora de sincerarse y conformarse con una
inflación anual inferior al año precedente, como dice Melconían últimamente en muchos medios y en off se lo indica como
el futuro jefe de economía ante los persistentes desatinos de los que la
conducen, que no son expertos en tal metier, sino empresarios, circunstancia que no habilita idoneidad. O
hacerse los sotas y seguir aplicando el plan
perdurar (hasta el acto eleccionario presidencial), y mientras tanto usemos
a Moyano/Cristina, el aborto, la igualdad de géneros,
hasta llegar a esa fecha, dado que la oposición no existe… No olvidar que con
tal plan, que si existe y no es una
invención del ex economista estrella del PRO,
van a una balotaje seguro con los ánimos caldeados, dado que sus políticas
apuntan contra su electorado…¿Cuánto fue el aumento
promedio en el 2016? Un 25%, o un poco más ¿?. Si me dieran un 41% lograría que
muchos beneficiados me glorifiquen si me despiden (Banco Nación/Aerolíneas
Argentinas).
Veamos el lado positivo del OFF. Por siempre me molestaron las denuncias
de legisladores o políticos sobre actos ilícitos, o incompatibles con la ética
republicana. Aunque sus denuncias, sean remitidas a la justicia. No comprendía
porque las fuerzas de seguridad, servicios, o fiscales/jueces por si mismos no
lo hacían. De tanto escuchar a los periodistas que han ganado prestigio con su
rol de denunciadores seriales, a los cuales me atrae escuchar, comprendí
finalmente mí inocencia en la materia. Tomemos un sujeto cualquiera que le
molesta ver un político pavoneándose de su conducta ética, y este sabe en qué
trapisondas está incursionando el mismo simultáneamente. Cual complicado seria
su situación ante un funcionario judicial o público, ante la simple inquisición
del porqué de sus saberes que denuncia. No es imaginable que un delator se
involucre en el suceso declarado, sin verse comprometido. Resulta cómodo
recurrir a un periodista/legislador/político opositor, en el cual le
transmitirá su información sin riesgo alguno, que el receptor se tomará el
derecho a chequear, amparado en sus fueros o reservas de fuentes, siempre que
no sea maliciosa como está establecido en la jurisprudencia. En fin, esta
visión de la info subrepticia ha sido positiva o en otras decepcionaron por
falta de pruebas fehacientes, pero que sirven para marcar al o los denunciados.
En otras, visualización del denunciador como futuro redito político, con sus
limitaciones y retaliación posible. Evidentemente el OFF existirá por siempre, aunque no sea confiable o no nos guste.
Gracias por su atención.
Francisco
Alberto Scioscia
Aportes e interrogantes
ciudadanos,
074 marzo 12 de 2018.-
P.D: no
hice una alusión desmerecedora de los derechos femeninos, tan necesarios de ser
discutidos y/o plebiscitados adecuadamente ( léase por
el sí o no simplemente), que exceden a este artículo dada su complejidad
(requiriendo la mayor información técnica/científica y ética)