Combatiendo al capital:
"El que vende no asesora"

 

En  un resumen de nota de un suplemento, leído accidentalmente antes de comenzar por el cuerpo principal, se aludía que existía un servicio en el cual se analizaban los precios de los distintos supermercados, pudiéndose comprar desde el mismo. Me preguntaba mientras leía el diario como era factible tal avance que pondría en jaque la tan resguardada información de precios general entre ellos. Leída la nota finalmente, el copete no respondía a esa realidad. Era de una cadena de supermercados minoritaria, a la cual se podía acceder a las góndolas gracias a cámaras dispuestas en las mismas, pero solo restringida a esa cadena.

Hoy pueden evitarlo, pero no podrán hacerlo por mucho más tiempo. La vieja técnica del tero, ya no podrá sostenerse. Todos tendrán tarde o temprano que estar en la WWW y se compararán precios entre los mismos. Asimismo, los productos en sí, por volumen/calidad/cantidad. Pero como esto es fastidioso, habrá quien ofrezca hacerlo y sin costo (pagaran los anunciantes y/o las empresas que no tengan ninguna necesidad de chicanear), además de llevar a su domicilio lo mas ajustado a sus necesidades, sin importar de que supermercado provienen. Podrán guardar la información estándar, modificable por el usuario, y remitir la mercadería periódicamente. Usaran el marketing con "permiso" para sugerirnos nuevos servicios o productos. ¿ Que así   perderemos el placer de comprar? No, pues esto compete a lo rutinario. Y las variaciones se darán por la publicidad o el marketing aludido. Comprar una nueva camisa o un suéter todavía será mejor hacerlo personalmente, so pena de ensartarnos, por ahora. Textura, olor y caída todavía no podrán reemplazarse fácilmente.

Siguiendo esta línea, estas empresas  se tentarán en comprar ellos mismos los productos a la firma que los genere. Es decir actuar como distribuidora y bajando precios (depósitos por locales, cajeras x debitos, sin repositores, etc.). Asimismo tendrán una alianza estratégica con aquellas empresas de productos que respeten al consumidor sobre todas las cosas. No sé si ir tan lejos como Lipovetsky - que ética/empresas son compatibles y negocio- pero como dicen los actores top habrá que ponerse en la piel del personaje que deben representar, para ser lo más parecido a él. Ponerse en la del consumidor para parecer que está a su favor sin subterfugios.

Este esquema es traspolable a cualquier transacción. El accionar mediador especializado, será mucho mas conveniente en esta jungla de vendedores que no asesoran sino que tratan de convencerte, escondiendo cartas. Y si  aquellas logran que pueda ser gratuito - lo podría pagar la empresa que seleccionaron/anunciantes- establecido su desarrollo/confianza, serán nuestros oráculos. Con acceso en línea por computadora y simplificado al máximo el uso de ésta, proveer uno sus necesidades - mediante un formulario orientado y bien estructurado, casi todo cruces- tendremos el producto adecuado a nuestras necesidades y en nuestro domicilio.

En fin, el comercio como se conoce a fines del segundo milenio pasará a la historia. Los consumidores tendrán dos opciones; la expuesta vía asesoramiento y consultar a la empresa proveedora del servicio que ratificara o no los supuestos de la mediadora, eliminando márgenes de error y comiéndonos los "garrones" actuales... Asimismo la firma responsable del producto expondrá recurriendo a todos los recursos posibles: audio, vídeo, tres dimensiones, sin escamotear información cerrando un circulo productivo para el consumidor, su razón de ser.

Los humanos somos emotivos por naturaleza y comprar es una de las actividades más interferida por las emociones, desde las mas simples a adquirir una casa o un coche ( de terror). Estas sensaciones conspiran con las decisiones acertadas. La mejor perfomance humana es cuando no nos involucramos, discriminado el objetivo deseado   del sujeto deseante. Esto es lo que nos ofrecerán estas empresas mediadoras independientes del futuro, cuyo negocio será ese. Distorsionarlo será su fin como tal. Quienes se especialicen y acierten en su asesoramiento serán prestigiadas y subsistirán.

Lo expuesto no es un supuesto futurista, esta cerca. Las telecomunicaciones generaran una revolución en múltiples campos. Ya nada será igual en el comercio y en la producción de bienes y servicios. Y también en la organización del trabajo
( pero esto será otra nota).



 (Solidaria e Idónea). Francisco Alberto Scioscia letter.gif (161 bytes)
 
www.redsoleido.com.ar Numero 3 - 15/10/99